domingo, 16 de noviembre de 2014

Tijuana Moods - Charles Mingus - 1957

El jazz me recuerda al surf. El surfista surfea la ola. Sigue una norma simple: seguir de pie; por lo demás improvisa la mejor manera de atacar la ola en cada momento. La ejecución de cada ola es diferente y esta es la esencia del surf.

Charles Mingus sobresale entre los músicos de jazz por su sentido orquestal, una mezcla de la tradición más antigua de las Big Bands y unas ciertas connotaciones clásicas. Conserva la frescura del jazz, pero aporta un objetivo muy claro y predispuesto. No se trata de lanzarse a la interpretación de un tema. Hay un fuerte sentido de la composición y de la ejecución.

Hay muchos discos increíbles de Mingus, este sin duda esta entre los más increíbles. Espléndidamente grabado.

Ojo, exite una versión de 2CDs con tomas alternativas muy interesantes.


Young Django - Stéphane Grappelli - 1979

Hay músicos que con los años se agotan. Es casi un axioma en la música de rock. En el jazz pasa menos. Concretamente, a Stéphane Grappelli, esto no le pasaba. Este disco, con el contrabajista Niels Orsted Pedersen y los guitarristas Philip Catherine y Larry Coryell, es fenomenal.

El hecho de que Graphelli se mantuviese lúcido nos permite oírlo en buenas grabaciones. Si perseguimos los discos con Django, vamos a encontrarnos con tomas mono, no muy buenas. Personalmente, si la música no está bien grabada, la puedo entender como documento histórico, pero no la disfruto igual.

En este caso estamos de suerte. Pero el disco es un homenaje, no un revival. La modernidad ha pasado por Graphelli y el contrabajo de Pedersen no nos permite de ningún modo hundirnos en el pasado.



jueves, 30 de octubre de 2014

The Chico Hamilton Special

Foreststorn "Chico" Hamilton (Los Ángeles, California, 21 de septiembre de 1921 − Manhattan, Nueva York, 25 de noviembre de 2013)1 fue un baterista estadounidense de jazz.
Fue compañero de estudios de Charles Mingus, Illinois Jacquet y Dexter Gordon, debutando profesionalmente con Floyd Ray y Lionel Hampton (1940). Después, acompañó a Lester Young y graba con Slam Stewart. Se incorporó a la banda de Count Basie, en 1946, y dos años más tarde, comenzó a tocar con la cantante Lena Horne, con quien permaneció hasta 1954. Grabó en trío para Pacific Jazz, el sello discográfico prototípico del West Coast jazz, y después (1955) formó un quinteto con Buddy Collette y Jim Hall. Con cambios sucesivos en la formación, la banda se mantuvo hasta mediada la década de los 60, cuando el quinteto, entonces con Charles Lloyd en los saxos, obtuvo bastante repercusión.
En los 70 y 80, su grupo adquirió fama de "cazatalentos":2 Gábor Szabó, Larry Coryell, Steve Potts, Arnie Lawrence, Arhur Blythe, etc.
Falleció en Manhattan el 25 de noviembre de 2013 a los 92 años.3


Fuente Wikipedia


Detras de Gábor Szabó


Descubrir a Chico Hamilton fue una sorpresa. Andaba detrás de grabaciones del guitarrista  Gábor Szabó y acabé escuchando alguno de sus discos con Chico Hamilton ¡Eran los mejores!

1962 - Chico Hamilton - Drumfusion




Columbia Records

Bass – Albert Stinson
Drums – Chico Hamilton
Guitar – Gabor Szabo
Tenor Saxophone, Flute – Charles Lloyd
Trombone – Garnett Brown

Liner Notes – Ralph J. Gleason
Photography By [Cover] – Leigh Weiner
Producer – Irving Townsend, Teo Macero

1963 - Chico Hamilton - A Different Journey




Warner Bros

Bass – Albert Stinson
Drums – Chico Hamilton
Guitar – Gabor Szabo
Tenor Saxophone, Flute, Composed By – Charles Lloyd
Trombone – George Bohanon

Liner Notes – Nat Hentoff

1963 - Chico Hamilton - Man From Two Worlds




Impulse!

Bass – Albert Stinson
Composed By – Charles Lloyd (tracks: 1 to 9, 11)
Design [Cover] – Robert Flynn (2)
Drums – Chico Hamilton.
Guitar – Gabor Szabo
Tenor Saxophone, Flute – Charles Lloyd
Trombone – George Bohanon (tracks: 8 to 11)

Engineer – Rudy Van Gelder

Executive Producer – Dave Grusin, Larry Rosen
Photography By [Cover, Liner] – Charles Stewart*
Producer – Bob Thiele
Reissue Producer – Michael Cuscuna
Remastered By – Paul Elmore

1965 - Chico Hamilton - El Chico




Impulse!
Alto Saxophone, Flute – Sadao Watanabe
Bass – Al Stinson*
Drums – Chico Hamilton
Guitar – Gabor Szabo
Percussion [Latin] – Victor Pantoja, Willie Bobo
Trombone – Jimmy Cheatham (tracks: A3, B2, B3)

Engineer – Bob Simpson

Design [Cover] – Robert Flynn (2)
Design [Liner] – Joe Lebow
Photography By [Cover & Liner] – Charles Stewart*
Producer – Bob Thiele

1966 - Chico Hamilton - The Further Adventures Of El Chico




Impulse!
Alto Saxophone – Charlie Mariano
Bass – Richard Davis (2) (tracks: A1, A3, A4, B2), Ron Carter (tracks: A2, A5, B1, B3, B4, B5)
Drums – Chico Hamilton
Flute, Flute [Alto] – Jerome Richardson
Percussion [Latin] – Victor Pantoja, Willie Bobo
Piccolo Flute – Danny Bank (tracks: A1, A3, A4, B2)
Guitar, Featuring – Gabor Szabo
Trombone – Jimmy Cheatham (tracks: A1, A3, A4, B2)
Trumpet – Clark Terry (tracks: A1, A3, A4, B2)

Engineer – Rudy Van Gelder

Design [Cover] – Robert Flynn (2)
Design [Liner] – Joe Lebow
Producer, Photography By [Liner] – Bob Thiele
Liner Notes – Nat Hentoff
Photography By [Cover] – Michael Wollman

Estos conjuntos son especiales. En la mayoría de las formaciones hay una flauta. La incorporación de la flauta en el jazz no es inédita, buenos ejemplos son Herbie Mann y Roland Kirk. Pero nunca me habían sonado tan integradas, ni tan oportunas, en un conjunto de jazz. Por otro lado, la trayectoria evolutiva de la guitarra de Gabor Szabo se plasma en estos discos, acaba por trascender la guitarra jazz tradicional aportando un toque realmente novedoso, guitarras acústicas con pastillas y un toque psicodélico con influencias del sitar. Al igual que el uso de la flauta, las aportaciones de Gabor, lejos de ser disonantes, encajan perfectamente. Chico, a la batería, es exquisito y sabe tomar el protagonismo justo. Si lo aderezamos por fantásticas grabaciones en la mayoría de los casos, los discos son increíbles. Por destacar uno, "A different journey" me ha quedado especialmente grabado, aunque esto puede cambiar en futuras audiciones.

Gábor tocando una acustica con una pastilla


Esto es solo el principio...


...porque pronto el hambre de Chico creció. Si tenía discos mejores que los que ya había escuchado, ¡¡uauuu!!

Después de mucha audición (y lo que me queda, donde sospecho que habrá alguna obra maestra) hay dos que me han llamado profundamente la atención:

1966 - The Dealer




Impulse! ‎

Alto Saxophone – Arnie Lawrence (tracks: 1 to 4, 6, 7)
Bass – Albert Stinson (tracks: 8, 10, 11), Richard Davis (2) (tracks: 1 to 7)
Cowbell – Willie Bobo (tracks: 9)
Drums, Percussion – Chico Hamilton
Flute – Charles Lloyd (tracks: 8, 11)
Guitar – Gabor Szabo (tracks: 8, 10, 11), Larry Coryell (tracks: 1 to 7)
Maracas – Willie Bobo (tracks: 8)
Organ – Ernie Hayes (tracks: 4, 5)
Percussion – George Bohanon (tracks: 11)
Percussion, Tambourine – Unknown Artist (tracks: 7)
Piano – Archie Shepp (tracks: 2)
Tenor Saxophone – Charles Lloyd (tracks: 10), Jimmy Woods (tracks: 8)
Trombone – George Bohanon (tracks: 10)
Vocals – Albert Stinson (tracks: 8), Chico Hamilton (tracks: 6)
Written-By – Archie Shepp (tracks: 2), Charles Lloyd (tracks: 11), Chico Hamilton (tracks: 1, 3, 4, 6, 7, 11), Gabor Szabo (tracks: 11), Jimmy Cheatham (tracks: 1, 3, 4), Larry Coryell (tracks: 5)

Engineer – Bob Simpson (tracks: 1 to 7), Rudy Van Gelder (tracks: 8 to 11)

Arranged By – Jimmy Cheatham (tracks: 1, 4)
Art Direction – Hollis King
Design [Cover Design] – Robert Flynn (2)
Design [Graphic Design] – Edward O'Dowd*
Photography By – Charles Shabacon
Producer – Bob Thiele
Mastered By [Remastered By] – Erick Labson
Reissue Producer – Michael Cuscuna

Destaco la aparición de Archie Sheep,  otro músico que me encanta. Desconocía esta colaboración suya. Nuevamente Chico nos propone exóticas formaciones y las lleva a terrenos maravillosos.

... Y finalmente


El disco que por ahora más me sorprendió: "The Chico Hamilton Special". Con la incorporación de un Violonchelo,  el uso del arco también, ocasionalmente, en el contrabajo,  flauta... suena en ocasiones a música de cámara. Lo sorprendente es que como todos los experimentos de "El Chico" nada es forzado y disfrutamos de maravilloso y renovado jazz.

Personalmente me olvido de que estoy escuchando música y me dejo llevar, completamente drogado, recorriendo paisajes maravillosos, inéditos y, para gran parte de los mortales, inalcanzables.

El sonido de este disco es espectacular. Una obra Maestra. Curiosamente, es el más antiguo de los que hemos visto. He empezado la casa por el tejado ;)

1961 - The Chico Hamilton Special




Columbia 

Alto Saxophone, Flute – Charles Lloyd
Bass – Robert Haynes (2)
Cello – Nate Gershman*
Drums – Chico Hamilton
Guitar – Harry Pope*

Liner Notes – Charles Edward Smith




jueves, 2 de octubre de 2014

Alta fidelidad y esoterismo

En el anterior post os he recomendado un equipo de música "básico". Es interesante saber cómo interconectarlo correctamente.

Conocí el mundillo del hifi cuando era un crío, cuando aún no se había inventado el disco compacto, cuando los platos más caros e impresionantes no podían evitar hacer clics: había demasiada incertidumbre, para un brazo lector, en una pista de cientos de metros. Este mundo siempre fue revelador. Me enseño cómo disfrutar de la música de un modo sublime.

Suciedad en un surco de vinilo
Suciedad en un surco de vinilo.

Dado que la recompensa que se obtiene de aplicar las tecnologías hifi es netamente espiritual, ya metidos en este campo, existe una cierta inercia de ir más allá de lo tecnológico. Las salas de audición parecen altares. Entre transductores, condensadores y lasers, hay también creencias esotéricas y objetos sagrados.



Lo dicho, de chaval, alucinando con las escuchas hifi, no dejo de extrañarme ver unas tarjetas con una clave de sol dibujada sobre el altavoz. Cuando pregunté sobre el tema, la respuesta fue: esto hace que los altavoces suenen mejor. Finalmente puse también tarjetas en mis altavoces de mierda. Quiero decir, no sin cierto orgullo, que no me duró mucho la gilipollez.

Cuento esto porque hay que estar prevenidos. En un mundo tan tecnológico como el del audio es muy frecuente encontrar un montón dogmas esotéricos y, lo peor, aprovechan para cobrarnos por ellos. Uno de estos dogmas es el de los cables de audio. Existen cables de miles de euros y gente que los compra. Los cables transfieren la señal y hay que conservarla integra, nos dicen, y tienen razón, y en base a este principio real, pero tratándolo con oscurantismo seudocientífico, nos clavan cucas y lucas.

Si nos paramos a pensar lo que requiere un cable para trasmitir la señal de forma integra, veremos que cualquier cable de cobre, con la suficiente sección, lo hace sobradamente. Más cuando estamos hablando de cables que rara vez superan los 5m, que bien pueden tener 3m, 2m ...

En base a la ciencia podríamos cablear nuestro equipo con casi cualquier cable de cobre . El que sea libre de oxigeno sirve, más que nada, para prevenir la oxidación en zonas terminales y expuestas.

No obstante, y aunque solo sea porque molan, utilizo cables un poco aparentes en mi equipo, es casi una cuestión estética.

RCA




Estos cables son muy adecuados. Gastar más no parece razonable. De hecho podríamos gastar menos. En Aki hay cable de audio de 1.5 de sección por 4 euros. Unos RCA normalitos se consiguen por 5 euros. Suficiente. Yo me dejo llevar un poquitin...

Hay múltiples y afamados ingenieros de sonido que nos avisan de este "timo" y hay documentación técnica muy sesuda en Internet. Pero me parece significativo el desafío de la organización James Randi para el desenmascaramiento de fraudes esotéricos. Ofreció un millón de dolares a cualquiera que demostrara científicamente que sus cables estratosféricos funcionaban mejor que unos normales. El resultado fue que, incluso aquellos que fueron invitados explicitamente, muy educadamente, se escaquearon.

Desafío "James Randi Educational Foundation"

lunes, 29 de septiembre de 2014

La música al alcance de tus orejas

El problema

Me gustaría que cualquiera que leyese este blog se convirtiese en un adicto como yo, en un melómano. Pero hay que empezar la casa por los cimientos. Lo primero que necesitamos es tener un buen acceso a la música. No hablo de música en directo, es maravillosa, pero necesitamos oír a los clásicos, a músicos que no son accesibles en conciertos, debemos oír mucha música, cuando nos apetezca, en estados de animo y concentración que solo se alcanzan en la intimidad. En definitiva: la dieta de un melómano se compone fundamentalmente de música grabada. Ahí comienza el problema...

Cuando escuchamos música ¿Qué escuchamos? ¿Suena bien en nuestro equipo? El sonido estéreo debe reproducir fielmente un escenario. La batería en su sitio, el contrabajo, piano, trompeta, el saxo. Si cerramos los ojos debe parecer que los músicos están ahí, podemos ubicar cada instrumento, percibir su volumen, reconocer su timbre ¿Es esto lo que tenemos? Si no es así, entonces, no estamos accediendo a lo que el artista creó. La mayor parte de los discos de los que hablo en este blog, si los escuchase de cualquier manera no me gustarían. No se trata simplemente de una melodía, son más complejos que eso. Cómo vamos a apreciar música compleja si lo que realmente escuchamos ni siquiera se le parece. Lamentablemente la música no está al alcance de todos, pero no por su complejidad. El problema es que los equipos que la mayoría tenemos en casa no nos proporcionan un acceso real a la música. Puede parecer duro, pero es una enorme verdad. Para el acceso a la lectura basta con un buen libro. El acceso a la música depende de la tecnología y hay que saber aprovecharla bien.

No es tanto cuestión de dinero (equipos dignos por 250 euros)

Si vais a tirar la toalla pensando que esto cuesta un dineral... ¡pues no! Quizás en otros tiempos no podría decirlo, pero a día de hoy, gracias a Internet, y a los curiosos derroteros de la tecnología, cualquiera que pueda gastar 250 euros puede oír música dignamente.

Hay que saber muy bien que hacer con ese dinero. Si seguís leyendo descubriréis un nuevo mundo, os abriré los ojos, no... los oídos, alucinaréis...

Estereofonía

Un equipo de música necesita espacio. No se pueden aparcar unos altavoces en un estante y esperar que suenen, por buenos que sean.

El sonido estéreo tiene la finalidad de reproducir un escenario sonoro. Desde nuestro punto de escucha recreará la ubicación física de los instrumentos. Las mejores grabaciones consiguen incluso efectos de profundidad y altura, una cierta tridimensionalidad. Es curioso que teniendo el sonido estereofónico casi un siglo, habiendo salido al gran público en los años 50, y siendo el estándar de sonido desde los 60, a día de hoy es muy poca la gente que ha experimentado realmente su efecto.

El estéreo se basa en disponer de dos canales diferenciados de sonido, uno para cada altavoz. Es simple. Si emitimos un sonido por cada altavoz al mismo volumen, digamos una guitarra, se ubicará en el centro. Si una batería suena mas por el altavoz de la derecha, nos parecerá que está a la derecha. Así, instrumento a instrumento, es posible construir un escenario sonoro.

La monofonía, en cambio, sitúa todos los instrumentos en el mismo punto sonoro. Debemos entender que los instrumentos son los actores de una pieza musical, distinguirlos es fundamental. En monofonía la única herramienta de la que disponemos para ello es el timbre. El estéreo, además de acercarnos a la disposición de un escenario real, de ser espectacular y agradable, nos da otra herramienta fundamental para distinguir las lineas instrumentales: la espacialidad. Dos guitarras que suenan desde el mismo punto parecen la misma guitarra, pero si suenan de distintos puntos se distinguen claramente. Insisto, hablamos de escenario sonoro, el efecto estéreo hace que los sonidos parezcan salir no solo de los altavoces, también, y claramente, del espacio que los separa.

El sonido estéreo es impresionante, pero requiere que los altavoces se ubiquen en una posición muy precisa con respecto el oyente. La dura realidad: para tener un equipo estéreo funcionando hace falta un espacio dedicado. Podemos conseguir equipos dignos y económicos, pero no podemos prescindir de esto. Si un estéreo no se coloca bien, nunca sonará. Grabaros esto en la mente.

La sala de escucha

Sería ideal disponer de una sala solo para música, pero la mayoría no podemos. Lo que si podemos hacer es que una habitación de nuestra casa gire entorno a la música, es decir, que aún siendo multifuncional se amueble de modo que el estéreo pueda estar bien ubicado.

No necesitamos demasiado espacio. Una regla de oro es que a menor habitación, altavoces más pequeños. Los altavoces grandes en habitaciones pequeñas no nos darán más que problemas.

Bien, unos altavoces estéreo deben colocarse así:


El estéreo óptimo se dispone ubicando las cajas a la misma distancia entre ellas que la que les aleja del oyente. Es decir, formando altavoces y oyente un triángulo equilátero (Dco=Dcc). Otro parámetro de uso habitual en estéreo es el ángulo entre cajas. Tratándose de un triangulo equilátero sera de  60°. La razón fundamental de este angulo viene de la gran direccionalidad de los agudos. Por este mismo motivo el altavoz de agudos (Tweeter) ha de quedar a la altura de nuestros oídos y apuntando hacia ellos. Este último requisito hace imprescindibles en nuestro sistema unos soportes de altavoz.

En general, el parámetro H dependerá del tamaño de la sala y también del tamaño de los altavoces. Desde H de 1,60 metros, con altavoces pequeños, ya podemos empezar a disfrutar de la música.

Fijaros que en la imagen se puede ver rodeando al sistema estéreo toda una zona de amarillo. En esa zona no debe haber nada, debe estar liberada para que el sistema se "aisle" de las reflexiones producidas en la sala. Nada de paredes ni muebles justo detrás de los altavoces, a los lados, detrás del oyente, entre los altavoces y el oyente. Debemos dejar que nuestro sistema respire, entre 50 y 100 cm de perímetro. De este modo el espacio mínimo dedicado empezará por 2,60x2,70 metros para unos altavoces pequeños.

Insisto. Nada de poner mesitas entre los altavoces y el oyente, ni cosas entre los altavoces. Debemos dejar ese espacio libre. Todo lo más, poner una mesita para los componentes entre las cajas (ampli, dac, portatil) La mía la he hecho yo mismo en madera de pino y no tiene más de 40  cm de altura. Casi forma parte del suelo ;)

Más allá de este espacio, una ecualización genérica tosca y casera, pero funcional en la mayoría de los casos, consiste en tener estanterías con libros, cuadros, muebles, lo normal en una casa, pero preferiblemente una habitación no muy desnuda, evitando así que sea "rebotona".

Os pongo una foto de mi sala de escucha para que os hagáis una idea. Los altavoces no llevan soportes pq son de pie. Están hechos por mi. Acabo de terminarlos :)


Barriendo tópicos

Algo muy corriente en esto de la alta fidelidad es el término WAF (Wife acceptance factor) Da por supuesto que las mujeres se escandalizan cuando los maridos meten en casa aparatos de música con unos requerimientos que les destrozan la estética del salón. Es un tópico asquerosamente machista. Estoy pendiente de que una amiga venga a mi casa a escuchar mis trastos con la idea de iniciarse en esto. No creo que se ande con gilipolleces.

Lo cierto es que, sin diferenciar el sexo, muchos se escandalizan cuando les expongo cómo exige un equipo de música ser colocado. Es lo que hay. Si uno quiere surcar el cielo ha de subirse al avión. Lo que vamos a obtener es alimento espiritual y supera  con creces los sacrificios. Si la televisión ha dado forma a nuestros salones ¿Porqué no el estéreo? Nuestras vidas deben girar en torno a cosas que merezcan la pena. Es preferible autoprocalamar nuestras "locas" preferencias que ser subsidiario de preferencias estereotipadas.

Componentes

Voy a recomendar un equipo muy barato para una sala de dimensiones mínimas. Eso si, si queremos que suene, debemos respetar todo lo anterior. Si no estáis dispuestos no valdrá la pena. Para comprarlo tendréis que hacer uso de Internet: ebay, amazon. No hay estas cosas en tiendas locales, incluso en Madrid o Barcelona. Pero Internet es mágico ;)

Tripath

El Tripath es una de esas cosas a las que cuesta dar crédito. 

Es un amplificador que según el modelo, completo, con fuente de alimentación, se puede conseguir desde 35 a 110 euros.

Lo increíble es que el Tripath le da caña a amplificadores de precios estratosféricos, de miles de euros. La compañía que les da nombre quebró por problemas económicos. La industria del audio hace cómo si no existieran. Supongo que temen que les reviente el mercado. Cómo es un tema minoritario, pues... ¡Chitón!

Ya, suena a locura. El caso es que  comprobar si tengo razón o estoy chocheando no os va a salir muy caro. Vosotros veréis...

Conviene saber alguna cosa:
  • El Tripath es un chip que aparece como una solución moderna a los problemas que presentaba la amplificación de clase D
  • El problema de los Tripath es que entregan muy pocos vatios. Por ello requieren altavoces de muy alta sensibilidad.
  • Existen varias implementaciones cómo la 2020 o la 2021. La 2020 es más musical pero entrega sólo 20w por canal. La 2021 lleag hasta 25w. Pero sólo la mitad de estos vatios son sin distorsión, lo que nos deja en 10w y 13w útiles
  • Existe un chip el TDA7498E, que no siendo un Tripath, se basa en los misma filosofía. Llega a los 160w, aproximadamente 60w sin distorsión. Su sonido es también excelente.
Sabiendo todo esto no será difícil encontrar un combo altavoces/amplificador apropiados.

Con las cajas que voy a recomendar y para hacer un equipo muy económico, el amplificador sería este:

Cajas Magnat

Aquí no voy a dar un bombazo como el del Tripath. Con las cajas acústicas no hay tanta magia. Por lo general si metes pasta puedes acceder a cosas mejores. Pero buscando aparecen cajas muy bien hechas, muy equilibradas, y a muy buen precio. Digamos muy dignas.

Como nuestra meta de hoy es hacer un estéreo pequeño y económico me voy a ir por las Magnat Monitor Supreme 100 que se pueden conseguir por 90/100 euros más gastos de envío. Alguna vez las he visto incluso más baratas.

Son unos minimonitores equilibradísimos que nos van a dar pocos problemas y muchas alegrías.

Una cosa, las cajas pequeñas no tienen mucho grave. Pero también debéis de saber que los graves en habitaciones pequeñas sólo dan problemas. Si disponéis de una habitación del copón podéis permitiros otras cosas.

Monitor Supreme 100


La fuente y el DAC

El sistema que estoy describiendo va a usar fuentes digitales. No me voy a meter en reproducción de fuentes  analógicas. De hecho vamos a utilizar un ordenador como fuente, preferiblemente un portátil que hacen poco ruido, cuento con que tengáis uno. Hoy el mejor lugar para localizar música es Internet. Lo hay todo y en alta calidad, en un formato sin perdida como "flac" no habrá diferencia con un cd, incluso sonará mejor, pues podemos acceder al audio de alta resolución sin tener un Super Audio CD

El Dac es el responsable de convertir la señal digital en analógica para su posterior amplificación. Hay quien dice que hoy cualquier ordenador tiene un DAC solvente. Pero mi experiencia dice que hay salidas de audio de portátiles que dejan bastante que desear. Deben estar soldadas con escupitajos o algo así...

Para curarnos en salud vamos a meter un DAC digno. 30 euritos. Este servirá

U-Control UCA 202



Si no tenéis portátil, un reproductor de dvd, el que tengamos en casa de cuando se veían pelis en DVD, seguramente resolverá bien, ya que la lectura de audio digital no tiene muchos secretos. Además, nos ahorraríamos el DAC. Estos cacharros suelen estar pensados para reproducir música y, "por lo general", suelen tener DACs dignos.

  

Soportes

Ya lo hemos hablado. Es un requisito que el Tweeter esté a la altura del oído y que los altavoces estén separados de las paredes Pero... ¿Dónde los ponemos?


Los altavoces hay que situarlos en unos soportes diseñados para tal fin. Ponerlos en una estantería es un sacrilegio. 

Lo soportes no son baratos, pero podemos hacerlos nosotros mismos gastando 20 euros en Madera MDF, tornillos, y un poco de arena para gatos o de obra del Brico Depôt. No serán muy bonitos, pero cumplen sobresalientemente. Los más curiosos pueden gastarse algo más en laminarlos o barnizarlos.

Os pongo una foto de unos hechos por mi en madera de pino, algún día haré un post detallando su construcción. Son unas simples columna de madera rellenas de arena. Llevan puntas de desacople en la base.



Ajustes

Ya disponéis de todo lo necesario para disfrutar de la música en casa. Ahora bien, los parámetros de colocación del equipo se pueden ajustar en base a audiciones:
  • El tamaño del triangulo equilátero con respecto a la sala.
  • La distancia con respecto a los altavoces: Yo suelo preferir acercarme un poco de más, rompiendo levemente el triangulo equilátero, para obtener una escucha de campo más cercano.
  • El mobiliario: Los distintos muebles tienen distinta respuesta acústica y su situación varía la sonoridad de la sala. Las alfombras, los cuadros, las estanterías, suelen ser poderosos aliados.
  

Actitud y oscuridad

Eso de escuchar a Wagner mientras se plancha... Pues que os voy a decir. Tremenda gilipollez. No hacemos otras cosas mientras leemos a Sakeapeare, a Pessoa. La música requiere toda nuestra atención. Personalmente me siento en mi sillón justo en el "sweet spot", el mejor lugar para la escucha de nuestro equipo, justo en el vértice que esta delante de las cajas del triangulo equilátero que conforma el sistema de audición y presto mucha, mucha atención. 

¿Conocéis a Daredevil? El superheroe ciego que tiene extremadamente agudizados el resto de los sentidos. Bueno, pues os recomiendo hacer como él. Escuchar totalmente a oscuras ayuda que nos olvidemos de que estamos en una habitación de nuestra casa y aceptemos mejor la ilusión que se nos presenta delante.

Música, concentración y oscuridad. Es una forma sublime de meditación.
  

La primera audición

Cuando un equipo de música es bueno hace evidente una gran realidad: no toda la música está bien grabada. De hecho, sabiendo los productores que por lo general somos pésimos reproduciendo música, muchas grabaciones modernas están descuidadas. En cambio, a finales de los 50, hasta avanzados los 60, hubo una época dorada de la grabación. 

Este disco grabado por el mítico Van Gelder, en el legendario Van Gelder Studio, no nos defraudará. Dos trombonistas maravillosos polarizan los canales del estéreo. Un disco muy agradable de escuchar. "Georgia On My Mind" puede ser muy buen comienzo ;)